Aprende a preparar un postre irresistible y fácil de hacer con esta tarta de chocolate sin horno.
La tarta de chocolate sin horno es uno de esos postres que conquista a todos con su suave textura y su intenso sabor a chocolate. Ideal para cualquier ocasión, este dulce es perfecto para quienes buscan algo delicioso sin complicarse con tiempos prolongados de cocción. Siguiendo los pasos de Eva Arguiñano, puedes convertirte en el rey o la reina de los postres en tu hogar.
Ingredientes necesarios
Para preparar esta deliciosa tarta, necesitarás los siguientes ingredientes:
- 200 gramos de galletas tipo María
- 100 gramos de mantequilla derretida
- 300 gramos de chocolate negro (mínimo 70% cacao)
- 400 ml de nata para montar (crema de leche)
- 100 gramos de azúcar
- 2 sobres de gelatina en polvo (aproximadamente 14 gramos)
- 150 ml de agua
- Opcional: cacao en polvo para decorar
- Opcional: frutos rojos para servir
Instrucciones paso a paso
Preparación de la base de galletas
- Comienza triturando las galletas tipo María en un procesador de alimentos hasta que queden como un polvo fino.
- En un bol, mezcla el polvo de galletas con la mantequilla derretida hasta obtener una mezcla homogénea.
- Vierte la mezcla en el fondo de un molde desmontable, compactando bien con una cuchara o con los dedos para que se forme una base firme. Refrigera mientras preparas el relleno.
Preparación del relleno de chocolate
- En un cazo a fuego lento, derrite el chocolate negro troceado cuidando que no se queme, removiendo constantemente.
- En otro bol, bate la nata (crema de leche) con el azúcar hasta que esté montada pero no demasiado dura.
- Una vez derretido el chocolate, retira del fuego y deja enfriar un poco. Reserva.
Incorporación de la gelatina
- En un recipiente pequeño, hidrata la gelatina en polvo en los 150 ml de agua, dejando reposar durante unos minutos.
- Luego, calienta ligeramente esta mezcla en el microondas o al baño María para que se disuelva completamente. Agrega la gelatina disuelta al chocolate derretido y mezcla bien.
Mezcla todo y vierte en el molde
- Ahora, incorpora lentamente el chocolate con gelatina a la nata montada, usando una espátula para mezclar suavemente, evitando que se baje la nata.
- Vierte la mezcla de chocolate sobre la base de galletas que preparaste anteriormente. Alisa la superficie con una espátula.
Refrigeración y tiempo de espera
- Cubre el molde con papel film y llevalo al refrigerador durante un mínimo de 4 horas, preferiblemente toda la noche, para que la tarta adquiera la consistencia adecuada.
Consejos para una tarta perfecta
- Elige un buen chocolate: Cuanto mayor sea el porcentaje de cacao, más intensa será la tarta. Un chocolate de calidad mejorará el sabor del postre.
- Gelatina bien disuelta: Asegúrate de que la gelatina esté completamente disuelta antes de agregarla a la mezcla de chocolate para evitar grumos.
- Refrigeración prolongada: Si puedes, deja refrigerar la tarta más tiempo, incluso 24 horas, para que adquiera una textura perfecta.
- Decoración: Puedes decorarla con frutas frescas o espolvorear con cacao en polvo justo antes de servir para un toque elegante.
Conservación
Esta exquisita tarta de chocolate sin horno se puede conservar en el refrigerador durante 4 a 5 días. Si la cubres bien, se mantendrá fresca y deliciosa. Recuerda evitar dejarla a temperatura ambiente por mucho tiempo para mantener su textura y sabor.
¿Puedo usar galletas sin gluten para la base?
Sí, puedes usar galletas sin gluten en lugar de las galletas tipo María para hacer una versión apta para celiacos.
¿Es posible hacer la tarta con chocolate blanco?
Claro que sí, aunque el sabor será más dulce y menos intenso. Pueden ser necesarias algunas modificaciones en la cantidad de azúcar dependiendo del chocolate que elijas.
¿Qué puedo hacer si no tengo gelatina en polvo?
Puedes utilizar gelatina en láminas. Para ello, necesitarás disolver 5 hojas de gelatina en agua fría antes de incorporarlas a la mezcla de chocolate caliente.
¿Puedo congelar la tarta?
Sí, puede ser congelada. Es recomendable hacer esto en porciones y envolver bien cada trozo para evitar quemaduras por congelación. Puede durar hasta un mes en el congelador.